Las incertidumbres sobre los impactos del cambio climático en el Perú, están asociadas entre otras cosas, a inadecuadas prácticas socioculturales (deforestación, cambio del uso de la tierra, etc.) y a configuraciones particulares del relieve como la presencia de la Cordillera de los Andes, que genera en nuestro territorio una diversidad de climas y microclimas. Ambos, tienen gran incidencia en el comportamiento del clima local con respuestas muy variadas al cambio climático global. El conocimiento y comprensión de cómo funciona el clima en regiones de alta montaña, o las regiones amazónicas, ha mejorado significativamente en los últimos tiempos, con el avance en la modelización del sistema climático a través de modelos físico-matemáticos (modelos acoplados del océano y la atmósfera), que permiten hoy disponer de información base para las evaluaciones regionales del clima actual, así como proyecciones del clima futuro. Estos modelos simulan la dinámica del sistema climático, considerando los diferentes escenarios de emisión de gases de efecto invernadero (GEI, siglas en ingles), generando a su vez diferentes escenarios climáticos. Para poder utilizar estos modelos globales en las evaluaciones de vulnerabilidad a nivel regional y local, es necesario realizar pasos intermedios, ya que éstos poseen una baja resolución espacial (entre 100 a 300 Km). Técnicas como el downscaling (reducción de escala) dinámico y estadístico son necesarios implementar.
Los estudios de generación de escenarios climáticos en el Perú describen dos aspectos importantes del clima nacional, en principio las características del clima presente y las tendencia climáticas en los últimos 40 años y en una segunda parte las proyecciones futuras en base a los escenarios climáticos globales, haciendo uso de técnicas de downscaling dinámico y estadístico para las variables evaluadas son las temperaturas extremas y la precipitación. Estos estudios nos permiten mejorar nuestro conocimiento sobre la vulnerabilidad actual y futura del país y orientar políticas adecuadas de adaptación frente al cambio climático en el ámbito nacional contribuyendo a los objetivos de desarrollo del milenio.
Tendencia de la precipitación anual en los últimos 40 años a nivel nacional y distribución de variaciones de temperatura mínima anual hacia el año 2030 según Modelo CCSM-NCAR/RAMS Escenario A2.